En la actualidad la cultura del consumo rápido y en serie conduce a la reducción de la calidad, la elaboración y la originalidad de los muebles y objetos que están en nuestras casas. Poco a poco hemos ido cayendo en la despersonalización de nuestros entornos habitacionales y en la triste separación entre fabricante y cliente. 

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Nosotros queremos recuperar la implicación del cliente en el diseño de su propio entorno, el valor del trabajo artesanal y el consumo local; aportar una relación más humana entre producto, fabricante y comprador.  Devolver al mueble su valor patrimonial y convertirlo en un producto útil y duradero.

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Nos gusta la pieza única. Hacemos las cosas de forma artesanal, sin ocultar la evidencia de lo hecho a mano y realzamos el valor de la calidez de las maderas nobles. 

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Creemos que lo útil es bello. Apostamos por lo práctico y cercano, por el uso adecuado de la maquinaria, el método y los materiales, por el reciclaje y el respeto al medio ambiente. 

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